Rutinas matinales que diminuyen el estrés y aumentan tu productividad
Madrugar
Leer
Ducharse Conscientemente
Meditar
Esta práctica es muy recomendable por muchas razones, entre otras cosas, te haces consciente de tu respiración, manejas tus pensamientos, te centras en el
momento presente, alivias el estrés y te enfocas en tus sensaciones corporales. Medita durante 10′ y recuerda que puedes hacerlo cómo más te guste, tumbado/a en la cama con los ojos cerrados o sentado/a con la espalda recta.
Busca la forma que más se adapte a tus necesidades. Además, puedes añadir agradecimientos y afirmaciones positivas para elevar tu estado de ánimo, algo fundamental para tu bienestar, para enfocar mejor el día y por lo tanto ser más productivo/a.
No coger el móvil
Desayunar
Escucha a tu cuerpo y bebe agua. Si te levantas sin hambre puedes comer más tarde, haciendo un desayuno saludable y equilibrado para aumentar tu energía y no lo contrario.
Hacer ejercicio físico
Haz yoga, estiramientos o unas series de ejercicios de pilates durante 5-10′. Si no tienes tiempo por las mañanas, puedes hacer ejercicio cardiovascular al finalizar tu jornada laboral o cuando mejor te venga, ya sabes caminar, correr, coger la bicicleta, nadar,…
Introducir esta serie de hábitos en tu rutina matinal te ayudará a mejorar tu productividad empezando el día con foco y sin estrés, y te llevará a convertirte en
una persona serena y feliz. No te pierdas mi programa “productividad consciente”.